Articulación temporomandibular

En nuestra clínica, realizamos diagnósticos y tratamientos efectivos para problemas de la articulación como dolor, crujidos, bloqueos y ruidos, mejorando la funcionalidad mandibular.

articulacion temporomandibular

¿Qué es la articulación temporomandibular?

La ATM es una articulación que se encuentra a cada lado de la cabeza, justo delante del conducto auditivo externo. Permite que la mandíbula se mueva hacia arriba, abajo y de un lado a otro, lo que es esencial para actividades como masticar, hablar y tragar. Los trastornos de la ATM ocurren cuando hay un problema en esta articulación o en los músculos circundantes, lo que puede generar dolor, limitación en el movimiento y otros síntomas.

Síntomas comunes de los trastornos de la ATM

Dolor facial

Puede ser en un solo lado o en ambos, especialmente al abrir la boca o al masticar.

Crujidos o chasquidos

Crujidos o chasquidos al abrir y/o cerrar la boca.

Dificultad abrir la boca

El bloqueo o la rigidez al mover la mandíbula puede dificultar actividades como comer o hablar.

¿Cómo funciona el tratamiento?

Te explicamos paso a paso cómo tratamos los trastornos de la articulación temporomandibular para devolverte el bienestar y la movilidad.

Evaluación inicial

Realizamos una evaluación exhaustiva para identificar las causas subyacentes del dolor o disfunción en la ATM.

Diagnóstico

Analizamos los resultados obtenidos para desarrollar un plan de tratamiento adaptado a tus necesidades.

Tratamiento

Comenzamos con tratamientos no invasivos como el uso de férulas, terapia física o control del dolor mediante medicamentos.

Seguimiento

Realizamos un seguimiento continuo para evaluar el progreso del tratamiento, ajustando las terapias si es necesario.

¿Qué opinan nuestros clientes?

Preguntas frecuentes

Pueden ser causados por una mala alineación de los dientes, bruxismo (rechinar los dientes), lesiones en la mandíbula, estrés, artritis, o problemas posturales.

El diagnóstico se realiza mediante un examen clínico, análisis de los síntomas, y pruebas complementarias como radiografías o resonancias magnéticas para evaluar el estado de la articulación.

El tratamiento suele ser no invasivo y se enfoca en aliviar el dolor y restaurar la función mandibular. Si es necesario, los tratamientos son cuidadosamente aplicados para minimizar cualquier incomodidad.

El tiempo de tratamiento varía dependiendo de la gravedad del trastorno y del enfoque terapéutico. En muchos casos, los tratamientos no invasivos pueden mostrar resultados en unas semanas, pero el seguimiento continuo es esencial para garantizar una recuperación completa.

La mayoría de los pacientes pueden continuar con sus actividades diarias mientras reciben tratamiento. Si se requieren ajustes más intensivos o cirugía, se discutirán las recomendaciones.

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